1. Asegúrese de que su distribución de activos está en línea con sus objetivos
Una de los determinantes más importantes para saber si su cartera está posicionada para alcanzar sus metas financieras está en la distribución de activos -cuanta exposición tiene en renta variable, en renta fija, en liquidez, etc. Muchos gestores de fondos, por ejemplo, han reducido su peso en emergentes estos últimos años. No es necesariamente malo, pero podría ser una señal de que necesita añadir a su cartera más exposición a este tipo de activo.
2. Radiografíe su cartera
Una vez haya evaluado la distribución de activos de su cartera, preste atención a cómo están posicionados sus bonos y la parte de renta variable de su cartera. Compruebe, por ejemplo, si sus posiciones en renta variable están distribuidas en los distintos sectores del mercado, y comparar ese posicionamiento con los pesos del índice de referencia elegido. Vea igualmente si su cartera está desproporcionalmente sesgada hacia uno o dos valores individuales.
3. Revise sus posiciones individuales
Una vez haya revisado su posición agregada de la cartera, es el momento de realizar un rápida revisión individual de cada una de sus posiciones. Para los fondos tome note de cualquier cambio en la gestión, modificaciones de la estrategia, o alteración del fondo (muchos de los fondos han cambiado de manos a lo largo de los últimos años).
4. Examine su rentabilidad
Es ciertamente un error prestar demasiada atención a la rentabilidad a corto plazo, pero la revisión de la cartera trimestral o semestral debe incluir una rápida valoración de qué posiciones están proporcionando el mayor impulso o lastre en la rentabilidad total de la cartera. Está bien echar un vistazo a la rentabilidad generada a lo largo del año, pero céntrese más en las cifras a largo plazo. Tome también nota de la rentabilidad absoluta. Una rentabilidad sistemáticamente baja puede ser un indicador de que algo serio está yendo mal. Pero si el razonamiento para comprar ese valor o fondo sigue intacto, una mala rentabilidad también puede ser una buena oportunidad para añadir posiciones en el momento de reequilibrar la cartera.
5. Piense en su próximo movimiento
Después de que haya revisado el estado actual de su cartera, es el momento de planificar su próximo movimiento. Debe, por ejemplo, asegurarse de programar una fecha para reequilibrar su cartera. La sabiduría convencional sobre planificación financiera sostiene que el mejor momento para hacerlo es el final de año, así que aún está a tiempo.